
Superproducción histórica (probablemente la última) del ciclo clásico, de la que plagió muchas ideas y secuencias el mediocre "Gladiator" de Ridley Scott. Es una gozada ver un film con tan buena factura, con extras de verdad y sets espectaculares. Samuel Bronston tiró la casa por la ventana -26 millones de dólares de entonces (como 170 de ahora) y se arruinó del todo- El resultado es un buen film, con dos partes muy diferenciadas, la primera muy fúnebre y oscura, la segunda colorista y más desmadrada.Una fiesta
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