Loable mezcla de drama y película de ciencia ficción en un único escenario, modesta, sencilla pero efectiva, que se centra en una obsesiva investigadora de un observatorio astronómico (interpretada por la actriz española Andrea Trepat en una buena composición) que, justo la noche en que su padre está agonizando en un hospital, logra tomar contacto con una inteligencia extraterrestre. A partir de ese momento, se encontrará en una encrucijada vital: La oportunidad de su vida, seguir el protocolo que le permitirá entrar en contacto con una inteligencia extraterrestre o ir a ver a su padre en la última ocasión que tiene para despedirse de él... Idea que es desarrollada con tal vez un exceso de metraje, pero que encuentra en el uso prácticamente de un único escenario (bien rodado por el realizador Luis Tinoco) y un único personaje principal su mayor virtud, pero a veces también su mayor defecto. Curiosa.
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