Curioso film de José Antonio Nieves Conde que nos muestra a un autor cinematográfico que dominaba el medio y sabía rodar con destreza (aquí la hay). En esta ocasión al servicio de una historia de redención que interesa menos: Un legionario (Fernando Fernán Gómez) que, por hacer trampas en una partida de cartas, hace que maten a su mejor amigo. Este hecho desencadenará un cambio personal y terminará con él como seminarista -para luego ayudar a su familia a ir por el buen camino-. Es un film con mensaje y estructura de fábula moralista, que el director de "Surcos" y "Los Peces Rojos" rueda con mucho oficio , pero que debido precisamente a ese fondo tan rancio a mí no me convence tanto como en otros films suyos. Con todo no se puede negar que tiene muchos elementos notables
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