La decadencia total de la fórmula, en un film aburridisimo, contaminado por el infantilismo absurdo de la propuesta y la mediocridad de un guión que no tiene ni pies ni cabeza (Frank Miller no se que demonios hizo). Lo remata además una espantosa batalla final (que pretende ser espectacular) rodada con cuatro figurantes. Mala a más no poder
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