Probablemente el último gran título de Argento, a pesar de sus irregularidades y de una segunda parte con guión y resolución bastante decepcionante...Pero quedémonos con lo que vale la pena: La set piece de las Galerías Uffizzi, la música de Morricone y un sinfin de buenas secuencias (casi todas en la primera mitad del film) de aliento fantástico inolvidable, los actores tambien ayudan: Especialmente una Asia Argento pone una tremenda credibilidad en su personaje. Lo dicho , el film que marca el cierre de una etapa y la entrada de un lento pero claro declive en la carrera de su director
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