Simpática película de robos y aventuras escrita y dirigida por Michael Crichton, quien adaptaba su propia novela. La trama se centra en un audaz plan para robar una gran cantidad de oro que se transporta en tren desde Londres a Folkestone para financiar la Guerra de Crimea. El cerebro detrás del plan es Edward Pierce (interpretado por Sean Connery), un carismático ladrón que recluta a varios cómplices, incluyendo a Robert Agar (interpretado por Donald Sutherland), un experto en abrir cerraduras, y Miriam (interpretada por Lesley-Anne Down).
Crichton construye un relato muy británico, rodado en locaciones auténticas que contribuyen a la perfección de la ambientación, complementado por un excelente trabajo de vestuario. El elenco es notable, con Connery, Sutherland y Down demostrando una química excelente. Además, la fastuosa banda sonora de Jerry Goldsmith aporta un dinamismo enorme al conjunto.
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