El controvertido Brian DePalma director de innegable fuerza visual que alterna en su filmografía grandes clásicos -especialmente del terror y el suspense- confilms en los que no supo controlarse lo suficiente, encontró en esta ocasión los ingredientes adecuados: Unos actores en estado de gracia (Pacino mesuradísimo,Penn sorprendente) y un guión ideal lleno de romanticismo, fatalismo y toques operísticos, o la elegíaca música de Patrick Doyle.
DePalma conduce con elegancia y precisión el relato, le imprime el ritmo preciso logrando una mezcla vigorosa de thriller y tragedia romántica, donde hay espacio para colocar sus set pieces visuales, tan bien conjuntados (el billar, las muerte en el hospital y la mayestática persecución final) que no se superponen ni sobresalen al relato, sino que lo complementan.
En definitiva, si en el momento de su estrenó me estremeció, esta -enésima- revisión me ha confirmado la película no solo como la definitiva obra maestra DePalmiana, sino también uno de los mejores films del cine americano de los 90
Sin lugar a dudas, una de las mejores películas que he visto. Ésta y Cadena Perpetua me marcaron por aquella época. Hay escenas de carlito's Way que me desarman, como el prólogo y su final, o la relación de amor. Sean Penn, por cierto, impagable (de OSCAR), De Palma firma su mejor película desde 1993 hasta hoy, y PATRICK DOYLE soberbio, de cuando era PATRICK DOYLE. Amen GERMAN.
ResponderEliminarNo puedo estar más de acuerdo. La mejor pelicula de su realizador, (que tiene unas cuantas grandes películas...) y entre las tres mejores películas de los 90 sin duda alguna
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